miércoles, 7 de diciembre de 2011

Los nuevos - viejos tiempos

Estos dos animales, que no tienen la culpa de nada, estabulaban plácidamente en una habitación del Palacio de Congresos de Córdoba esta mañana. Van a ser los protagonistas de un portal de Belén viviente, una representación navideña que respeto, pero que debería hacerse en otro sitio que a) no sea público y no paguemos todos y, sobre todo, b) esté habilitado para acoger ganado.


Música militar en el Teatro Góngora, un obispo que sale casi cada día en la prensa y que encima discute con el poder civil, un buey amarrado a la antigua muralla del palacio califal, borregos, patos y ocas en el patio de un edificio público para representar un Portal de Belén viviente y la suspensión de todo aquello que huela a progresista, a rojo. A otros tiempos. Unos tiempos que hoy son viejos porque lo que ahora toca son los nuevos - viejos tiempos de amor, de paz, de familia, de religión. de respeto y de orden. Son los nuevos - viejos tiempos que ha elegido una inmensa mayoría. Son los nuevos - viejos tiempos de Córdoba, de Andalucía (ya mismo llegan, no se impacienten) y de España.